martes, 29 de noviembre de 2016

La unidad y la MUD: Entre la espada y la pared

LA UNIDAD Y LA MUD: ENTRE LA ESPADA Y LA PARED

Estamos ante la imperiosa necesidad de redefinir lo que entendemos por Unidad: si un chantaje emotivo que nos induce a aceptar lo inaceptable, en connivencia con la dictadura,  y así castrar las aspiraciones libertarias de nuestro pueblo arrastrándonos a una Sexta República. O un frente de combate para sacudirnos el yugo del castrocomunismo y abrir los portones de Venezuela a las anchas avenidas del futuro. Es la disyuntiva que todos enfrentamos.
 To be or not to be. That ist the question.

Antonio Sánchez García 





@sangarccs

            El estruendoso fracaso del último diálogo – una vez más – ha venido a poner dramáticamente de manifiesto las graves y aparentemente insuperables limitaciones estratégicas de la MUD y los partidos que la controlan: AD, PJ, UNT y la agrupación larense de Henry Falcón. Sirven al fin de coordinar sus pretensiones electorales, pero no sirven a la histórica necesidad del pueblo venezolano por liberarse de las cadenas de la dictadura, superar los impases estructurales del estatismo rentista e impedir que avance y se consolide en un sistema de dominación totalitario, semejante a los dominantes en las dictaduras del bloque soviético durante las décadas de Guerra Fría: sedicentes democracias populares con la bendición de algunos partidos clericales y de centro, disminuidos hasta la caricatura y tolerados como “compañeros de ruta” del comunismo, así como la iglesia protestante y/o católica consentidas mientras no intervinieran en los asuntos públicos. 

            Desde luego que Henry Ramos, Julio Borges, Manuel Rosales, Henry Falcón y sus cogollos partidistas saben perfectamente que los diálogos – todos ellos, del primero al por ahora último -  son absolutamente inconducentes y no tendrán otro efecto que frenar las luchas populares, incentivadas por los partidos verdaderamente contestatarios y definitivamente anti sistema. Lo grave es que ese objetivo los unifica a ellos estratégicamente con las pretensiones del régimen: superar los graves impasses que suponen podría provocar una exitosa rebelión popular y un reordenamiento profundo y radical del Estado venezolano surgido de una transición que apuntara a construir una nueva Venezuela – libre de las taras del populismo clientelar y estatista de los que todos dichos partidos están trasminados hasta la médula de sus huesos y de las que, por lo mismo, estuvieron excluidos -, orientada hacia el futuro y no hacia la reconstrucción del pasado, aparentemente superado en el falso hegelianismo de una Sexta República. 

            Abundan las pruebas concluyentes de que para dichos partidos, miembros del llamado G3, la alternativa no es dictadura o democracia sino votos o balas. Como lo expresara Edgar Zambrano, segundo de a bordo del staff de Henry Ramos, en enero del 2014. Comprometiéndose – vaya coincidencia – a obtener pacíficamente la liberación de todos nuestros presos políticos y preparándoles así, - ¡hace tres años y sin ningún resultado concreto! – el terreno a Nicolás Maduro, a Timoteo Zambrano y a Rodríguez Zapatero. Por tanto, y puesto que los votos han demostrado su absoluta ineficacia definitoria - ¿o alguien cree que el 6 D marcó el fin de la dictadura y no el comienzo del totalitarismo? – no cabe otra alternativa que someterse a las balas. Ergo: a dialogar. Esto es: a frenar los ímpetus liberadores de nuestra sociedad civil, a encarcelar a los dirigentes de los partidos que hace mucho tiempo comprendieron que una dictadura marxista sólo cae bajo la inclemente, tenaz e intransigente movilización popular y a sepultar el malhadado Referéndum Revocatorio, con la buena pro de los compañeros de Henrique Capriles, que lo convirtiera en sangre de su sangre. ¿Entonces?

            De modo que el escenario a futuro para la MUD no es otro que pasar bajo las horcas caudinas de Maduro y el PSUV, los generales de Raúl Castro y los enviados de Jorge Bergoglio, aunque puede que esta vez sin la buena pro del Departamento de Estado, en manos de los republicanos de Trump. Insistir en participar en elecciones estériles y seguir montando el perverso acomodo con la tiranía: gobernadores y alcaldes dizque opositores en manos del ejecutivo castrocomunista, los jueces del horror, una asamblea castrada y unas fuerzas armadas podridas hasta la extenuación. O asumir el fracaso y tratar de remediarlo mediante un cambio copernicano de su política conciliatoria con el régimen. 

            Ante ese panorama trágico de dar por perdida nuestra República y pasar a engrosar la lista de naciones al garete – que la economía no perdona y ya se habla de una inflación récord mundial del 4000% y el dólar galopa hacia los 5.000 bolívares - los partidos como Voluntad Popular, Vente Venezuela, ABP y todos aquellos que forman parte de la llamada Unidad Opositora tendrán que asumir los hechos: o se unen, articulan un agresivo y realizable programa de transición, nombran y respaldan a una Junta Democrática de Gobierno que sirva de contrapropuesta a la satrapía reinante y sea el vocero de la denuncia de las iniquidades de la dictadura a nivel nacional e internacional, se nieguen a acompañar las trapisondas y se pongan al frente de un implacable acoso militante y activo contra el régimen, arrastrando a los desconcertados administradores de la MUD, que o volverán a ventear la falsa salida del diálogo o deberán solicitarle a Bergoglio su papal extremaunción. O este partido habrá llegado a su fin. 

            Si el régimen pudo evitar su caída y darle un golpe mortal al RR, salvando a Maduro y a la dictadura – que no son diferenciables - fue porque confió en que las apetencias y mezquinas ambiciones de los jóvenes y viejos cuadros de todos los partidos sueñan con detentar los cargos en lisa para las próximas elecciones regionales, próxima piñata castrista. Así dichos cargos, obtenidos gracias a la mayoría ciudadana y a la desesperación e indignación de la ciudadanía, engañada con falsas ilusiones, no sirvan absolutamente de nada más que para satisfacer las ansias de figuración de quienes usaron el sufrimiento popular poniéndolo a su servicio. Mientras el régimen cuente con el ejecutivo, la justicia y las fuerzas armadas, su aplastante aparato mediático y el malandraje de los colectivos, todo cargo en manos opositoras es paja. Como la Asamblea Nacional. Sólo sirve para decorar una dictadura implacable, que no se irá jamás. Antes se morirá Maduro, como su padrastro Fidel Castro, de viejo. 

            Estamos ante la imperiosa necesidad de redefinir lo que entendemos por Unidad: si un chantaje emotivo que nos induce a aceptar lo inaceptable, en connivencia con la dictadura,  y así castrar las aspiraciones libertarias de nuestro pueblo arrastrándonos a una Sexta República. O un frente de combate para sacudirnos el yugo del castrocomunismo y abrir los portones de Venezuela a las anchas avenidas del futuro. Es la disyuntiva que todos enfrentamos.

To be or not to be. That is the question.

lunes, 28 de noviembre de 2016

Todo tiene su final

Todo tiene su final

Por Virginia Contreras

 

Abogada, experta en Seguridad.

Puede que para algunos esta situación de los narco-sobrinos pase desapercibida dentro de la problemática política que viven los venezolanos



Venezuela se ha visto impactada en estos últimos días por ciertos eventos de innegables consecuencias para el gobierno bolivariano. Después de meses de espera por el inicio del juicio en contra de dos sobrinos de la primera dama venezolana, detenidos en Haití y trasladados a los Estados Unidos (EE.UU) por la Oficina de Administración para el Control de Drogas de EE.UU (DEA), el pasado 18 de noviembre un jurado en el estado de Nueva York los considero culpables del delito de conspiración para introducir cocaína en EE.UU. Si bien los enjuiciados tendrán que esperar meses para conocer su condena, es obvio que la misma será lo suficientemente alta para castigar la gravedad del delito cometido.

Este evento por sí solo, si bien ha debido causar un impacto sentimental en la pareja presidencial, no tendría por qué acarrear mayores consecuencias en el mundo político venezolano, habida cuenta que la responsabilidad penal es personal, y que solo quienes son condenados como reos de delitos deben asumirla. No obstante, en el presente caso la historia no necesariamente tiene porque terminar así.

Haya sido en serio, o simplemente por hacer alarde a lo que significa estar físicamente tan cerca del poder, el caso es que los “narco-sobrinos”, como se les conoce a estos venezolanos, señalaron ante funcionarios de la DEA, que el objetivo de la negociación de la droga era contribuir al financiamiento de la campaña política que realizaría su tía -esposa del presidente de Venezuela- para nominarse como diputada a la Asamblea Nacional (AN). Adicionalmente, dichos jóvenes hicieron alusiones en relación con Diosdado Cabello, hombre fuerte del chavismo, a quien le atribuyeron el control supremo del tráfico de drogas en el país.

En otro lugar esta última aseveración por sí sola, acarrearía un verdadero sisma. No así en Venezuela, en donde resulta cotidiano escuchar todo tipo de acusaciones, sin que ninguna autoridad haga algo por encausarlas. Paradójicamente, el Sr. Cabello, siempre tan diligente para solicitar la intervención de los tribunales de la Republica sobre quienes se han atrevido a hablar en su contra, ha mantenido silencio frente a una acusación tan grave.
Puede que para algunos esta situación de los narco-sobrinos pase desapercibida dentro de la problemática política que viven los venezolanos, pero en EE.UU. la justicia no olvida. Más aun cuando junto a delitos federales como este, los narco-sobrinos han mencionado a estas personas, vinculadas con violaciones de los derechos humanos.
A esta situación a la cual hacemos referencia, podemos agregar otros eventos producidos en las últimas horas en los cuales dos familias, ubicadas en distintas zonas geográficas de la región, sufren la pérdida de sus seres queridos.

El viernes, en horas de la mañana, la comunidad regional,  representada en la Organización de los Estados Americanos (OEA) se enteraba del fallecimiento de quien fuera hasta ese momento embajador de Venezuela ante el organismo hemisférico, Bernardo Álvarez.

Ese mismo viernes en la noche, la comunidad mundial conocía del fallecimiento del ex dictador cubano Fidel Castro, líder de la revolución cubana, de innegable influencia en la política mundial en su momento y responsable de la hambruna, los fusilamientos, las violaciones de los derechos humanos, y de todas las consecuencias que la implantación del sistema marxista ha representado para Cuba.

En el caso del ex diplomático venezolano fueron muchos los momentos de tensión que vivió al mando de la Misión de Venezuela en la OEA, al tratar de defender lo indefendible frente a quienes acusaban al Gobierno de Venezuela de violación sistemática de los valores democráticos. Para quienes lo conocieron les resultaba asombroso ver al Embajador Álvarez, un hombre culto, inteligente, proveniente de una familia de abolengo intelectual del occidente del país, hablar de la manera como lo hacía.  Y es que si bien nadie podrá nunca explicar a qué se debió el cambio en su actitud, el hecho de que el gobierno revolucionario exija sumisión absoluta bajo la amenaza de considerarte su enemigo, tal vez hubiera tenido un grave peso sobre él.

Del lado de Fidel Castro, serán muchos los que trataran de explicar el nuevo rumbo que tomara Cuba tras la muerte del ex dictador. Olvidan que desde hace años este apenas coordinaba sus ideas, y que hasta las funciones naturales de su organismo dependían de la ayuda de terceros. No en vano en el 2011 dejo el mando a su hermano Raúl, quien ha asumido las riendas del poder, la apertura hacia EE.UU y la consejería al Gobierno de Venezuela, circunstancia que no cambiara por la muerte de su hermano. Por supuesto que Fidel era el símbolo, y a ello se aferraba el Presidente Maduro, así como lo hacía el otrora Chávez. Aun así, indistintamente de los consejos de quien fuera, la decisión de destruir a Venezuela, de eliminar sus libertades, de intentar anular los valores morales de los ciudadanos y de modificar la economía del país hacia terribles derroteros no puede atribuírsele a nadie más que a sus propias autoridades. Lo contrario demostraría una benignidad injustificable. 

Todas estas circunstancias a las que hacemos alusión deberían llevarnos a una reflexión respecto a nuestra actitud, y fundamentalmente a nuestras respectivas realidades, en donde antes que reconocer la necesidad de cambiar de rumbo frente a los errores cometidos de parte y parte, pareciera que son los fanatismos y la intolerancia lo que impera. Con ello no solo dejamos pasar oportunidades únicas de enrumbar a Venezuela, sino a nuestros propios destinos como personas, olvidando que “polvo eres y en polvo te convertirás”, (Génesis 3; 19). Cuando ya no estemos aquí, ¿quién podrá explicar nuestros actos?

COMUNICADO DEL FRENTE INSTITUCIONAL MILITAR A LA FAN

FRENTE INSTITUCIONAL MILITAR
 
Asociación civil de militares retirados
frentemil2@gmail.com, FB: Frente Institucional Militar,FIM, @frentemil





EL FRENTE INSTITUCIONAL MILITAR EXHORTA  A LOS MILITARES ACTIVOS  A RESTITUIR LA VIGENCIA DE NUESTRA CARTA MAGNA
Nosotros, los abajo firmantes, integrantes del Frente Institucional Militar, militares en la honrosa situación de retiro de las Fuerza Armada Nacional, afectados como la mayoría de los  venezolanos por la grave crisis que aflige al país en todos los órdenes del acontecer nacional;  luego de un análisis amplio de las causas a las cuales podría atribuírsele tan infausto resultado, nos dirigimos a ustedes, militares activos de la Fuerza Armada Nacional, no comprometidos con actos, expresiones o ideas que contraríen la conducta que los miembros activos de la institución militar  deben desarrollar de acuerdo a lo estipulado  en los artículos 328 al 331 de la Constitución de la República, para recordarles que, en ejercicio de su condición esencial de ciudadanos, de su calidad de miembros de un grupo familiar y de ser parte integrante de la sociedad venezolana, están calificados para ejercer los derechos que le son inherentes según la Constitución y leyes del país, y por lo tanto, son atributos natos de su conciencia ciudadana, como la de todos los que nacimos en esta tierra que llaman de gracia, velar por que se mantengan intactos los valores, tradiciones y principios que, según norma universal, conforman la mayor de las riquezas de una nación.
Por todos los ciudadanos a nivel nacional e internacional, incluyéndolos a ustedes y a sus respectivas familias, es conocida la notoria descomposición de la sociedad en las áreas de la salud, la seguridad física, jurídica y alimentaria, en el nivel cultural y educativo de sus integrantes y en la conducta política y ciudadana de quienes, dentro y fuera de altos cargos públicos, desprecian olímpicamente el cumplimiento de las disposiciones legales que nos rigen; y es impresionante la falta de acción preventiva y correctiva indispensables para enfrentar tantos males y para crear polos de desarrollo agrario, industrial y del conocimiento, quedando en meras palabras todas las promesas y ofertas que en tales campos se anuncian y se ofrecen como panacea universal, para lograr la satisfacción y felicidad de todos los habitantes del país, algunas por incumplimiento de la palabra ofrecida, otras por la incapacidad para desarrollar las actividades necesarias para su ejecución y muchas, o por lo fantasiosa que fue la idea promovida, o por el escaso valor significativo y real que tal promesa contenía.
Para coronar los graves daños  que socavan nuestra calidad de vida y resquebrajan nuestras esperanzas por un futuro mejor para nosotros y nuestros descendientes, en clara y flagrante violación al espíritu y la letra de la Ley, tal como lo dijimos en nuestro comunicado anterior, el gobierno, en complicidad con las Instituciones del Estado secuestradas y a su servicio, nos despojan del legítimo derecho constitucional establecido en el artículo 72 de la Constitución Nacional, de decidir, pacífica y electoralmente, revocar o confirmar el mandato por el cual elegimos al Presidente de la República. Y, ahondando la crisis que destroza la credibilidad y confianza de los venezolanos en las instituciones y organismos que conforman el Estado y los órganos de representación popular de los que disponemos, se conforma una mesa de diálogo, que a la fecha no ha mostrado resultado visible alguno para encontrar la salida pacífica y electoral  de la crisis y atacar los problemas que como nación enfrentamos, y de la que se desprende una mayor sensación de falta de comprensión de las necesidades reales de las mayorías, y de las acciones necesarias para neutralizar los males que las originan e iniciar cuanto antes un proceso de recuperación de la patria y restablecimiento de la democracia.
En razón a todo lo expuesto, insistimos una vez más en exhortarles a todos ustedes, miembros activos de la Institución Militar, a participar junto al resto de la ciudadanía, y apoyarla, en las actividades pacíficas y constitucionales necesarias para restaurar la vigencia de nuestra Carta Magna, tal como lo reza en su artículo 333, y a demostrar con su conducta que no son ajenos a la problemática socio política que aqueja al país y, muy por el contrario, son también víctimas de ella en el desempeño de su vida diaria y en el cumplimiento de sus obligaciones profesionales, familiares y sociales. Prolongar por más tiempo la severa crisis que nos afecta significaría potenciar la inestabilidad política y social con consecuencias imprevisibles.
Hagamos honor a nuestra condición de militares que cuando salimos de nuestras fronteras fue a SEMBRAR LIBERTAD y en nuestro espacio interior respetamos y seguimos la máxima de nuestro Libertador SIMON BOLIVAR: “Maldito el soldado que utilice sus armas contra el pueblo que juró defender”
Caracas, 28 de noviembre de 2016
 
Por el Frente Institucional Militar, suscriben:
 
Vicealmirante Rafael Huizi Clavier (Presidente)
General de Brigada (Ej.) Teodoro Díaz Zavala (Vice-presidente)
Coronel (Ej.) Rubén Darío Bustillos Rávago (Secretario de Organización)
Coronel (Ej.) Luis Enrique Sucre (Representante del Ejército)
General de Brigada (GN) Simón Figuera Pérez (Representante GN)
Capitán de Navío Pedro Rafael Betancourt (Representante de la Armada)
Coronel (Av.) Ángel Rodríguez Campos (Representante de la Aviación)
General de División (Av.) Manuel Andara Clavier (Ex Presidente del FIM)
General de Brigada (Ej.) Juan Antonio Herrera Betancourt (Ex Presidente FIM)
General de Brigada (GN) Miguel Aparicio Ramírez (Ex Presidente del FIM)
General de División (Av.) Maximiliano Hernández Vásquez
General de División (Ej.) Fernando Ochoa Antich
General de División (Ej.) Carlos Julio Peñaloza
Vicealmirante Julio Lanz Castellanos
Vicealmirante Andrés Eduardo Brito Martínez
Vicealmirante Carlos Ramos Flores
General de División (Ej.) Vicente Narváez Churion
General de División (Ej.) Rafael Montero Revette
General de División (Ej.) Simón Luis Virgilio Tagliaferro
General de División (Ej.) Jorge Tagliaferro De Lima
General de División (Av.) Vladimir FilatovRiabkov
General de División (Av.) Jesús Hung Abreu
General de División (GN) José Barrios Dulcey
General de División (Ej.) Raúl Salazar Rodríguez
General de División (GN) Rafael Damiani Bustillos
General de División (GN) Luis Camacho Kairuz
General de División (Av.) Justo Saavedra
General de División (Av.) Antonio Morales González
General de División (Av.) Freddy Yánez Méndez
General de División (Av.) Julio García Pino
General de División (Ej.) Adolfo Tovar Salas
General de División (Ej.) José Antonio Olavarría Jiménez
General de División (GN) Enrique Prieto Silva
General de División (GN) Luis Felipe Nery Arrieta Ávila
General de División (Av.) Iván Darío Jiménez
General de División (GN) Landis Ferreira Zambrano
General de División (GN) Marcos Pacheco Melgarejo
General de División (Av.) Raúl Ramón Morales
General de División (Ej.) Oswaldo SujúRaffo
General de División (Ej.) Andrés Medina Torcat
General de División (Ej.) Alfonso Romero Romero
General de División (Ej.) Félix Cáceres Pinzón
Vicealmirante Freddy Mota Carpio
Vicealmirante Héctor Ramírez Pérez
Vicealmirante Efraím Díaz Tarazón
Vicealmirante Mario Iván Carratú Molina
Vicealmirante Julio Chacón Hernández
Vicealmirante Rafael Bertorelli Moreno
Vicealmirante Antonio Pérez Criollo
Vicealmirante Jesús E. Briceño García
General de Brigada (Ej.) José Gregorio González Rodríguez
General de Brigada (Ej.) Juan Ferrer Barazarte
General de Brigada (Av.) Néstor Sánchez Toro
General de Brigada (GN) Antonio Contreras Escalante
General de Brigada (GN) Rafael Vera Ruiz
General de Brigada (GN) Domingo Rojas García
General de Brigada (Ej.) Camilo Vethencourt Rojas
General de Brigada (Ej) Evelio GilmondBaez
General de Brigada (Ej.) Luis Felipe Párraga Barrios
General de Brigada (Ej.) Raimundo Guisandes López
General de Brigada (Ej.) Henry Lugo Peña
General de Brigada (Ej.) Néstor González González
General de Brigada (Ej.) Cesar Ramos Álvarez
General de Brigada (Ej.) Rubén Medina Sánchez
General de Brigada (Ej.) Guaicaipuro Lameda
General de Brigada (Av.) Eduardo Caldera Gómez
General de Brigada (Ej.) Gregorio Andrade Andrade
General de Brigada (Ej.) Gustavo Salas Paredes
General de Brigada (Ej.) Bernardo Díaz Castillo
General de Brigada (Ej.) Rafael Peña Pereira
General de Brigada (Ej.) Ángel Vivas
General de Brigada (GN) Humberto SeijasPittaluga
General de Brigada (GN) Orlando Hernández Villegas
General de Brigada (GN) José Salazar Heredia
Contralmirante Cesar Manzano Zavala
Contralmirante Elías BuchzserCabriles
Contralmirante Luis Moreno Zambrano
Contralmirante Eddy Guerra Conde
General de Brigada (Av.) Mariano Márquez Oropeza
General de Brigada (Av.) Pedro Pereira
General de Brigada (Av.) Jorge Luis Guerrero Barrios
General de Brigada (Av.) Eduardo Báez Torrealba
General de Brigada (Ej.) Richard Salazar Rodríguez
General de Brigada (Ej) José E. Godoy Peña
General de Brigada (Av.) Román Gómez Ruiz
General de Brigada (Av) Omar Ruiz Rodríguez
General de Brigada (Av.) Gonzalo Gómez García
General de Brigada (GN) Raúl Cepeda
General de Brigada (GN) Francisco Limongi
General de Brigada (GN) Gilberto Mayorca
General de Brigada (GN) Ramón Rodríguez Mayol
Contralmirante José Velasco Collazo
Contralmirante Eddie Ramírez Poveda
Contralmirante Oscar Betancourt Patiño
Contralmirante Gregorio Molleja Rodríguez
Contralmirante Daniel Comisso Urdaneta
Contralmirante Félix Antonio García Zambrano
Contralmirante Rubén Germán Torres Leal
Contralmirante Jorge Alberto Bustamante Cáceres
Contralmirante Ricardo Hernández Hernández,
Contralmirante Raúl Bustamante Pulido
Coronel (Av.) Sammy Landaeta Millán
Coronel (GN) Luis Lara Santamaría
Coronel (Ej.) José Antonio Omaña Hernández
Capitán de Navío Juan Bautista Márquez Moreno
Capitán de Navío Julio Sánchez Correa
Capitán de Navío Gonzalo Merino Valery
Capitán de Navío Emilio De RogatisPorreca
Coronel (Ej.) Orlando Martínez Ugueto
Coronel (Ej) José Antonio Omaña Hernández
Coronel (Av) Pedro Soto
Coronel (Ej.) Antonio Varela
Coronel (GN) Luis Morales Parada
Coronel (Ej.) José Machillanda Pinto
Coronel (GN) Artemio Boada
Coronel (Ej.) Marcos Porras Andrade
Coronel (Av) Campo Elías Flores
Coronel (Ej.) Otoniel Arellano Pérez
Coronel (Ej.) Widman Olaf Alcalá
Coronel (Ej.) Carlos Barito
Coronel (Ej.) Domingo Santana Gómez
Coronel (Ej.) Yucepe Pilliery
Coronel (Ej.) Gustavo Díaz Vivas
Coronel (Av) Juan José Farías Molero
Coronel (Ej.) Juan José Rendón González
Coronel (Ej.) Luis Enrique Sucre Párraga
Capitán de Navío Eduardo Ovalles Campero
Capitán de Navío Carlos Rodríguez Bártoli
Capitán de Navío Luis Guillermo Ramos Castillo
Capitán de Navío Nelson Antonio Escalona Fernández
Coronela (GN) Dido Cabrera Bustillos
Coronel (Ej) Emilio Méndez Martínez
Coronel (Av.) Silvino Bustillos
Coronel (GN) Antonio Semprún
Coronel (GN) Hidalgo Valero
Coronel (Ej.) Ángel Serrano
Coronel (Ej.) Domingo Salazar Martínez
Coronel (Av) Enio Aldazoro
Coronel (Ej.) Orlando Suarez Galeano
Capitán de Navío Javier Sánchez Pereira
Coronel (Av) Oswaldo Martínez
Coronel (Ej.) Carlos Daniel Rojas Pérez
Coronel (Ej.) Atilano Carrillo Bracamonte
Capitán de Navío Carlos Lavado Móttola
Capitán de Navío Luis Salas Marcano
Coronel (GN) Miguel Ángel Casanova Ostos
Capitán de Navío Rubén Piña Saa
Capitán de Navío Rafael Pérez sarmiento
Coronel (Av.) Danilo Rodríguez
Coronel (Av.) Juan Bautista Gómez Rojas
Coronel (Av.) Emmanuel Calles Manzano
Coronel (Av.) Ramón Francisco Guzmán Díaz,
Coronel (GN) Carlos M. López
Coronel (GN) Omar Dávila Flores
Coronel (GN) Freddy Eduardo Martínez
Coronel (GN) Francisco Limongi
Coronel (Ej.) Manuel Ledezma Hernández
Capitán de Navío Clímaco Rivero Moreno
Capitán de Navío Humberto Lazo Cividane
Capitán de Navío José Santín Puertas
Capitán de Navío Bernardo Jurado Capecchi
Capitán de Navío Alberto Shadah Udelman
Capitán de Navío Eddy Méndez Pérez
Capitán de Navío Oscar Ibarra Labady
Capitán de Navío José Gregorio Noguera Torres
Capitán de Navío Nelson Rafael Camarillo Morillo
Capitán de Navío Ángel Valero
Coronel (Ej) José Bruzco Hernández
Coronel (GN) Iván Henríquez
Coronel (GN) Esmerio Delgado
Coronel (GN) Omar Angel Aranguren
Coronel (GN) Williams Linares
Coronel (GN) Alirio Miguel Cabrera
Coronel (GN) Alexander Flores Lamús
Coronel (GN) Freddy Eduardo Martínez
Coronel (GN) Alex E. Montenegro Méndez
Coronel (GN) José Luis Quintana
Coronel(GN) Gustavo Enrique Ferrer Barroeta
Coronel (Ej.) Castor Torcat
Coronel (Ej.) Nelson Castro Moreno
Coronel (Ej.)Máximo Marchán
Coronel (Ej.) Eduardo Guzmán Pérez
Coronel (Ej.) Eduardo José Suarez Montana
Coronel (Ej.) Gabriel Oscar Duque Vivas
Teniente Coronel (Ej.) Julio César Moreno
Teniente Coronel (AV.) Guillermo Beltrán Vielma
Teniente Coronel (Av.) Moisés Brunstein Reina
Teniente Coronel (Ej.) Jesús López Planchart
Teniente Coronel (Ej.) Cesar Augusto Becerra Lujan
Capitán de Fragata Alejandro López Hernández
Capitán de Fragata Ramón Guerrero Ramírez
Capitán de Fragata José Rafael Linares Badillo
Capitán de Fragata Alonso Sader Castellanos
Capitán de Fragata Reinaldo Ramírez Dala
Capitán de Fragata Leopoldo Salas Rommer
Teniente Coronel (Ej.) Pedro Tarcisio Donaires Lozada
Teniente Coronel (Ej.) Antonio Torres Alvarado
Teniente Coronel (Ej.) Isaac Antonio Tirado Gómez
Teniente Coronel (GN) Edgar Rodríguez Vicentelli
Teniente Coronel (GN) Carlos Romero Rico
Teniente Coronel (GN) Francisco Modesto Ignacio Serra Di Día
Teniente Coronel (Av.) Iván Ballesteros
Mayor (Av.) Luis Hartmann Ruiz
Mayor (Ej.) José Ramón Salas La Riva
Mayor (Ej.) Federico José Ventura Infante
Mayor (Ej.) Ángel Landaeta Yánez
Mayor (Av.) Raynell Mayella Martínez Mujica
Capitán de Corbeta Ali Boscan
Capitán (Ej.) Jesús Rojas Díaz
Capitán (GN) José Carrero Marquina
Capitán (GN) Orlando Velasco
Capitán (Ej.) Jerry Suarez
Capitán (Ej.) Alfredo Salazar Bohórquez
Capitán (Ej.) Ricardo Salazar Bohórquez
Capitán (Ej.) Wismerck Martínez Medina
Capitán (GN) Pedro José Flores Rivero
Capitán (Ej.) Carlos Blondell Tineo
Capitán (Ej.) Víctor Rafael Salas Estupiñan
Teniente de Navío Antonio Ríos Rojas
Teniente de Navío Carlos Rodríguez
Teniente de Navío Carlos Villalobos Franchi
Teniente de Navío Henry Clemant
Capitán (GN) Leonardo Carrero Araujo
Teniente de Navío Pedro Pedrosa
Teniente (GN) José Antonio Colina
Teniente (Av.) Miguel José Bravo Escalona
Teniente (Av.) Jorge Santa Cruz
Teniente (Ej.) Daniel Eduardo Morales
Teniente de Fragata Carlos Rodríguez Briceño
Teniente de Fragata. Rafael Figueredo Cassini
Cabo 1ero Ángel Humberto Martinez Camejo
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